La Alacena de Juampi

La Alacena de Juampi, uno de los mejores restaurantes románticos de Alicante.

Comida de calidad con productos de la tierra

Los restaurantes y bares más solicitados y concurridos suelen estar en la zona del centro de Alicante. Por ahí encontramos una oferta gastronómica inmensa, en la que podemos encontrar de todo. Pero lo mejor no está exclusivamente en el centro. Hoy vamos a hablaros de un rinconcito en el barrio de Benalúa que reivindica los buenos restaurantes, la modernidad y el buen hacer en la cocina, esté donde esté situado. Nos referimos a la Alacena de Juampi.

Local

El local es un pequeño paraíso en las oscuras (y descuidadas) calles del barrio. En el corazón de los antiguos edificios, el frío asfalto y las grises vistas de la ciudad (que poético me ha quedado) encontramos un hueco luminoso, brillante y bonito, lleno de detalles y, resumiendo, muy chulo.

Todo el mobiliario es blanco y las mesas son grandes, más que en otros locales. Las paredes están pintadas en blanco y verde y decoradas con detalles curiosos como marcos, sin foto ni dibujo, o muebles antiguos de madera. También hay frases escritas en la pared de famosos escritores, como Gabriel García Márquez, como esta:

"El amor es tan importante como la comida, pero no alimenta"

Todo está muy bien escogido y se está a gusto dentro. Da imagen de lujo, de alto copete y muy moderno. A nosotros nos sorprendió gratamente y nos gustó mucho.

La Alacena de Juampi por dentro. Imagen extraída del facebook de La Alacena de Juampi

Carta - [Clic aquí para descargar la CARTA de LA ALACENA DE JUAMPI en PDF]

Es un restaurante un poco diferente en este aspecto. Según nos contaron ellos mismos, no tienen carta completa fija. Lo que hacen es ir todas las mañanas al mercado y seleccionar los mejores productos, y en base a las compras que hayan realizado elaboran una carta y un menú únicos para cada día.

Esto tiene sus pros y sus contras. Si no eres una persona muy especial con la comida o si no tienes alergias, no hay problema. Pero como sea al revés no sabes lo que te puedes encontrar. Es un poco a la aventura. A mí, personalmente, me gusta.

Foto extraída del facebook de la Alacena de Juampi

Pero no solo tienen este menú diario y efímero, también disponen una carta de platos fijos. Esta no es muy larga, todo hay que decirlo, y se trata de sándwiches y hamburguesas. Eso si, no son platos que se hagan en cualquier bocatería.

Las raciones son grandes, mucho más de lo que a priori podéis imaginaros, y los precios están realmente bien para lo que ofrecen, estando en torno a los 5,00€ la ración entera y 3,00€ la media. Nos quedamos con ganas de probar una de esas hamburguesas, la verdad.

Carta permanente

Encontramos una gran cantidad de vinos, pero no tenemos una carta. Nos guiamos por las explicaciones del camarero, el cual nos dijo que según lo que pidiéramos nos recomendaba un vino u otro. Incluso con el menú entraba un maridaje especial de vinos y cerveza. Es un tema que por lo visto llevan muy bien.

La otra carta que si tienen es la de combinados y cócteles. Una carta interesante, variada y con algunas mezclas que, igual que la cocina, tienen una pinta increíble. Y siguiendo con su política de vivir al día, cada día también tienen un combinado especial que no aparece en la carta. ¡Que sorpresas nos deparará la barra!

Carta de cócteles y combinados

Básicamente esto es todo lo que se puede decir sobre la carta. Evidentemente, este restaurante daría para una entrada nueva en el blog para cada día, pero como no cobramos por esto, lo vamos a dejar aquí.

Nuestra experiencia

Nosotros llevábamos tiempo queriendo ir a cenar a la Alacena, pero entre unas cosas y otras, lo fuimos dejando. Nos lo recomendó un amigo y todavía tengo que verlo para darle las gracias.

Entramos y, sinceramente, no esperaba que fuese así por dentro. Vimos la carta del día, que está expuesta en la puerta y aunque nos pareció algo caro, entramos. Enseguida un camarero nos llevó a una mesa, nos trajo una carta y nos aconsejó.

Y claro, la carta me parecía realmente escueta. Lo que pasa es que al ser diaria obvian muchos detalles que el camarero, encantador por cierto, te explica sin problema. Te aconseja, te dice de que tratan los platos, el porque de la carta y el sistema que llevan... y sin ponerse pesado!

Copa de vino que pedimos. Venía con una racioncita de ensaladilla rusa, que a decir verdad no era nada del otro mundo. El vino estaba muy bueno.

Pedimos una ración de gamba roja al ajillo. Estaba buenísimo. Estaban un poco picantes y quizá para dos es una ración muy pequeña, pero yo estoy deseando repetir.

Huevo frito en aceite de gamba al ajillo

Cuando acabamos con las gambas, el propio cocinero salió a nuestra mesa y nos ofreció la posibilidad de hacernos un huevo frito con el aceite de las gambas. Aceptamos sin dudarlo y nos pareció un gran detalle. Y sobre todo porque no nos lo cobraron.

El huevo frito ese estaba a otro nivel. Muy bueno. Evidentemente, con el aceite de las gambas pues ya os podéis imaginar. Un diez de huevo.

El ultimo plato fue un risotto de de setas y trufas. ¡Vaya pinta! Estaba muy bueno también. He de decir que nunca había comido risotto y, para ser mi primera experiencia quedé realmente satisfecho.

Y con esto cenamos. Tengo que reconocer que hacía tiempo que no comía tan bien y tan a gusto. Los camareros muy atentos y rápidos, y la comida estaba de diez.

Al acabar se nos acercó un camarero y nos ofreció la posibilidad de tomar una copa. Entonces entró en juego esa copa que varía cada día (¿os acordáis?) y nos la explicó. Aquel día se trataba de un "Mojito de la Tierra".

Este llevaba en lugar de la clásica menta, romero y albahaca; en lugar de ron, ginebra y por lima llevaba naranja. Ahí es ná. Realmente lo pedimos sin dudarlo y no me arrepiento en absoluto. Sabía (inexplicablemente) a mojito. Tenía el recuerdo del mojito aun siendo distinto en todo. Si vais, aunque no esté en la carta, pedidlo.

Ahora llega la parte mala: la de pagar. Como dije antes, es un sitio algo caro. No iba a ser perfecto, y todas estas atenciones y servicios se pagan. En total nos costó:

-Copa de Vino (1,80€ x 4 copas) = 7,20€

-Gamba Roja al Ajillo = 11,00€

-Risotto de Setas y Trufas = 7,00€

-Mojito de la Tierra (6,50€ x 2 copas) = 13,00€

En total fueron 38,20€. No nos cobraron el huevo frito y no sabemos si fue por despiste o por tener un detalle con la clientela. En cualquier caso, nosotros encantados.

Conclusión

COMIDA: 9

La comida estaba espectacular. Todo muy bueno, recetas elaboradas y cocina de primera. El tema de la ausencia de carta y el aprovechar los ingredientes que haya en el mercado me parece un punto a su favor.

BEBIDA: 9

Tienen muchos vinos y muchas marcas de licores, sobre todo ginebras. La carta de cócteles es muy atractiva y el maridaje con la comida es todo un detalle. En este casi si que se echa en falta una carta con las marcas y demás.

PRECIO: 6

No vamos a mentir, es un sitio caro. Pero claro, por lo que pagas recibes un servicio. Es caro, porque no comimos tanto, pero nosotros lo pagamos encantados. La carta de hamburguesas si que está bien de precio.

SERVICIO: 9

Un servicio muy bueno. Gente profesional que hablaba claro pero sin enrollarse, y atentos, muy atentos. El detalle del huevo, o que nos explicaran todos los platos con cosas que no encuentras en otros sitios.

LOCAL: 8

Es muy bonito y espacioso. Siempre se puede mejorar, ya que quizá parece demasiado diáfano y vacío. En cualquier caso, es muy agradable, brillante y moderno.

LOCALIZACIÓN: 7

Está en el barrio de Benalúa, con todo lo que ello conlleva. A medio día no hay sitio para aparcar, pero si hay autobuses. Por la noche es al revés. Los días previos al mercadillo se puede aparcar en la misma puerta. Cerca hay varios lugares para ir a tomar algo, aunque el centro queda lejos.

NOTA FINAL: 8,5/10

Un sitio encantador y romántico. Ideal para ir en pareja, pero también para ir con amigos, siempre y cuando os comportéis. Comida y bebida de calidad, servicio de primera y sitio acogedor. Algo caro, pero merece mucho la pena.